Charla en Bolivia

4 de junio de 2005

Sai Ram, Sai Ram, Sai Ram, estoy muy, muy feliz de estar acá.

Le agradezco enormemente a Swami la oportunidad de volver a visitarlos y le ofrezco todo lo que vamos a hacer hoy en este encuentro, en la tarde y mañana ustedes a Sus Divinos Pies de Loto.

Hoy vamos a tener un día bastante intenso, especialmente ahora en la mañana.

Yo originalmente iba a responder preguntas pero quiero primero referirme a una serie de temas para tratar de aclarar puntos de bastante confusión aquí en Bolivia.

Lo primero que quiero decirles es que ustedes tienen que tener mayor claridad sobre quién es Sai Baba.

Si tuvieran mayor claridad sobre quién es Él, todas estas confusiones, en realidad, no existirían. Una vez que comprendan quién es Sai Baba van a poder comprender la Gracia que tienen, la oportunidad que tienen hoy aquí de estar en este salón.

Y, comprendiendo esa oportunidad estarían todo el tiempo felices. Una persona feliz ve solamente cosas positivas.

Sai Baba dice que hay cuatro clases de personas en el mundo:

-Está la persona que ve lo malo en lo malo

-Está la persona que ve lo bueno en lo bueno

-Está la persona que ve lo malo en lo bueno

-y está la mejor clase de persona que es aquella que es capaz incluso de ver lo bueno en lo malo.

Jesús dio un ejemplo de esto cuando viendo un perro muerto en proceso de descomposición, al verlo dijo: -"qué lindos dientes tiene".

Nosotros tenemos que ser la cuarta clase de personas.

Este es un ejercicio espiritual enorme.

Yo me voy a referir a esto en la tarde, en la conferencia pública y a ustedes les voy a pedir que dejen todas sus prácticas espirituales, que abandonen toda meditación, todo canto devocional.

Dejen todo si no pueden hacer una cosa primero que es la de ver el bien todo el tiempo y no pensar en el mal jamás.

Si no logran hacer esto, todo lo demás es un ejercicio de hipocresía, inútil.

No se puede creer que uno está en el camino espiritual cuando le presta más atención a lo negativo que a lo positivo. Es un tremendo error.

Hay muchas iglesias que le dedican un 99,9% a hablar del demonio, un 0,1% a hablar de Dios.

Este es un error, un error total, lo que hace a la posibilidad de avanzar hacia la luz.

Nosotros que estamos con Swami tenemos que no solamente cantar o unirnos para cantar, decir Sai Ram, sino que lo que tenemos que hacer es comprender su mensaje, comprender la esencia del mensaje de Sai Baba.

Nosotros repetimos todo el día que todo es amor, que Dios es amor, la palabra Unidad la repetimos pero no la ponemos en práctica.

No la ponemos en práctica cuando ejercemos el dañino ejercicio de ver lo negativo en vez de ver lo positivo, de ver con una lupa al prójimo en vez de vernos a nosotros mismos, de estar juzgando al prójimo. Dejen de juzgar.

El ejercicio espiritual más alto que existe es no pensar mal de nadie.

Traten de volverse maestros en este ejercicio espiritual.

No piensen jamás mal de nadie. Si asoma el menor pensamiento, erradíquenlo de la mente. Que esta sea la disciplina espiritual más alta. Más que meditar, más que cantar, más que nada.

Dedíquense a auto-observarse y a no permitir que en la mente de ustedes entre ningún pensamiento de juicio con respecto a la otra persona.

Swami habla de los devotos Sai:

Dice que está aquel que llega a un Centro Sai y entra con todo y después de un tiempo para y no hace más nada.

Dice que hay otra clase de devoto, que llega y está siempre en el mismo lugar. Después hay otra clase de devoto que llega un momento, trabaja y después se retira y la última clase que es el que llega y cada vez trabaja más. Este es el que se gana la medalla de oro en las olimpiadas Sai. Nosotros tenemos que ser esa clase de devotos, que cada vez trabajemos más.

¿Qué es esta Organización Sai?

Primero les quiero decir que es la vida según Sathya Sai Baba.

Para Swami, la vida que ustedes, que nosotros estamos viviendo es exactamente lo mismo que lo que sucede a la noche cuando soñamos.

Cuando dormimos a la noche tenemos un sueño donde creamos un mundo, donde vivimos una experiencia y luego despertamos y ese sueño se esfumó, desapareció.

Esta vida, aunque nos cueste comprenderlo, para Sai Baba es lo mismo que el sueño que soñamos a la noche.

Tiene una sola diferencia para Sai Baba: dura un poco más, nada más.

Es exactamente igual que el sueño de la noche.

Nos cuesta creerlo, estamos totalmente con la creencia de que esto es real pero es un sueño, un sueño que estamos soñando y un día nos vamos a despertar.

El propósito de la Organización Sai es ayudarnos a despertar lo antes posible, a nosotros y a los demás seres humanos.

Todos los seres humanos tenemos que tratar de ayudarnos mutuamente a despertar.

Este es el único objetivo por el cual ustedes tienen un cuerpo humano.

Todos nosotros estamos hoy en este salón porque hemos hecho muchísimos, muchísimos esfuerzos en vidas pasadas para lograr ahora tener el nivel de conciencia que nos trajo hoy a este salón en vez de estar en cualquier otra actividad mundana allí afuera.

Esto es el resultado del esfuerzo de muchísimas vidas.

Tenemos que darnos cuenta y no desaprovecharlo.